El juego en sí es un juego de estrategia militar por turnos, controlando a un paladín y teniendo que crearse un ejército con el que combatir contra los enemigos en un mundo de fantasía medieval con orcos, caballeros, enanos, elfos, esqueletos y muchos otros seres más.
Aunque inicialmente el juego se creó como una historia en la que un mago había tenido escondido de los orcos al heredero al trono de Wesnoth y cuando estos lo descubren emprenden una campaña para conseguir recuperar dicho trono, actualmente hay muchas más campañas y el juego se ha ido completando con los aportes de cientos de creadores amateurs, porque estamos hablando de un juego que es software libre y de distribución gratuita (es decir, es gratis, y además cualquiera se puede bajar el código y los gráficos del juego y mejorarlos, por lo que no hay una compañía detrás que te pueda quebrar o cancelar el proyecto si no lo considera suficientemente estratégico).Pese a que tanto los gráficos como la música del juego han ido evolucionando a lo largo de los años, desde luego no son nada del otro mundo. A fin de cuentas, hablamos de un fondo dividido en exágonos y las unidades están representadas por sprites sin ningún tipo de animación. Es decir, si quitamos la resolucón para la que está pensado el juego, desde luego en cuanto a gráficos está al nivel de clásicos como el Panzer General pero sin las animaciones de batallas (y para los más nuevos, este juego salió a mediados de los 90).
Pero como he dicho muchas veces, los gráficos sólo son una parte del juego, en algunos géneros una parte importantísima y esencial y en otros, como en los juegos de estrategia por turnos como es el caso que nos ocupa, secundario y relativamente poco importante.
Así que aunque a nivel gráfico sea bastante pobre, donde muestra todo su potencial es en las posibilidades que permite. Pese a que coger los rudimentos y jugarlo un poco es muy sencillo (pinchas en una unidad y con el botón derecho la mueves a donde quieres que se desplace, y si ahí hay un enemigo le ataca), dominarlo ya es más complicado, pues hay cientos de variables que influyen en el juego.Desde la hora del día (los elfos y humanos luchan mejor por el día, los "seres oscuros" por la noche), el tipo de terreno (los elfos van muy bien por los bosques, la caballería pesada es mortal en campo abierto, los enanos están en su hábitat natural entre las montañas, las ciénagas son lo ideal para los zombies...), la naturaleza de las criaturas (los magos blancos son especialmente letales por ejemplo contra los muertos vivientes), la experiencia de cada unidad, los apoyos que pueda tener (un capitán elfo hace que todas las unidades cercanas a él luchen mejor)...
Pero claro, no es como en el Command & Conquer donde muchas veces gana el que consigue crear el ejército más grande. Tus soldados no sólo te cuesta contratarlos sino también mantenerlos en la batalla, por lo que aparte de guerrear tienes que tener cuidado con tus finanzas de forma que tu ejército no acabe con tus reservas y se diluya.
Aparte, las unidades cogen experiencia y, claro está, mejoran a medida que libran combates (en especial si consiguen matar a alguna criatura). Esto es muy importante sobre todo con los magos, pues los niveles más bajos no son gran cosa y encima son muy caros, pero sólo con que suban a nivel 2 (y te costará, porque se mueren con nada y necesitan mucha experiencia para subir de nivel) ya verás si te compensa o no.Por supuesto, la experiencia de cada unidad se guarda y podrá ser utilizada dicha unidad en batallas futuras, siendo las más avanzadas tus tropas más valiosas y poderosas... y como pasa con todas las tropas de elite, las que más protegerás por encima de todo.
En definitiva, si te gustan los juegos de estrategia por turnos y quieres echarte a la boca uno que además sea gratuito y se vaya renovando cada poco tiempo, no dudes en echarle un vistazo a este Batalla por Wesnoth. No te arrepentirás.
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