Cuando los gráficos lo son todo: Rise of the Robots

Volvemos hoy a hablar de un juego que en su momento levantó una grandísima expectación y que él sólo se basta para justificar que una cosa llamada demo exista y sea bueno (para el consumidor). Pero para entender esto, hay que hacer un poco de historia.

Estamos en 1994. El CD-ROM poco a poco se va popularizando aunque aún la mayoría de ordenadores que se venden vienen sólo con disquetera y no con unidad óptica. Los Pentium llevan un año en el mercado y aún son demasiado caros, por lo que el ordenador medio que se vende es un 486 DX a 33 Mhz o un 486 DX2 a 66 Mhz, con 4 megas de RAM (8 los de gama más alta), unos 170 megas de disco duro y una tarjeta gráfica de 1 megabyte (una Number Nine era todo un sueño para la mayoría de nosotros).

Los juegos que más pegaban eran JDR y aventuras gráficas, juegos, especialmente los segundos, que requieren mucho espacio de disco duro pero poca potencia de procesador. Los juegos en perspectiva subjetiva están empezando como quien dice, el Doom original lleva un año como producto shareware y el Doom II está a puntito de salir, y pese a que se siguen basando en sprites y trucos gráficos para simular las 3D, el efecto es muy bueno. Pero siguen siendo en 2D, o 2,5D. Las resoluciones que más se llevan son las VGA, es decir, 320x240 píxeles, aunque algunos juegos, sobre todo los de estrategia comercial, están empezando a utilizar SVGA, es decir, 640x480 píxeles.

Dada la "enorme" potencia de los ordenadores de la época, los principales juegos en 3D son del tipo Alone in the Dark, con fondos prerrenderizados y personajes tridimensionales pero con pocos polígonos. Sí hay juegos 3D puros, pero son escasos y muy simples, sin texturas ni efectos de luces.

En el terreno de las consolas la cosa no va mucho mejor, pues la generación que está en el mercado es la de la SNES y la MegaDrive, consolas que ya arrastran unos pocos años y los PCs superan sin problemas.

Y entonces llegan las primeras imágenes de este juego, Rise of the Robots, con gráficos prerrenderizados y superrealistas (insisto, para la época). Cogías cualquier revista de finales del 94 que hablara del juego (como la Micromanía, la PC Manía, la revista Super Juegos o la que más te gustara) y empezabas a babear. Ese juego era otro mundo, infinitamente superior a cualquier otro juego de estas revistas. Y tenías que tenerlo. Una joya así tenías que tenerlo, como fuera.

Tal frenesí llegó también a las revistas, que se rindieron a sus gráficos. El único comentario del que dispongo de la época es de la Micromanía, concretamente la número 78 de noviembre de 1994 y entre las cosas negativas dicen Hmm..., er..., a ver..., ¡Vaya!, algo debe haber por ahí... Sí, sí. ¡Ah, no! Nos hemos equivocado. ¡Caramba! No hemos encontrado nada malo. Por cierto, el juego no se lleva un 100 sino un 95.

Con críticas como estas mis amigos y yo nos pusimos a buscar como locos quien nos pasara el juego. Entonces el eMule no existía, y si alguien no te pasaba el juego no lo podías copiar, y nosotros no podíamos pagar tal cantidad de dinero. Pensamos en que si no conseguíamos a nadie que nos lo pasara podíamos entre todos poner pasta para comprar el juego y luego nos lo copiábamos todos, pero entonces encontré a un chico que los vendía pirata a creo recordar que 500 ptas (los juegos para PC por aquel entonces costabas unas 5 o 6.000 ptas).

Para que os hagáis una idea de qué es lo que había en esa época, en la misma revista se comentan los siguientes juegos con sus respectivas notas:

• System Shock: 92
  
• Ghoul Patrol: 80
  
• The Chaos Engine: 87
  
• Micromachines; 80
  
• NHL Hockey 95: 83
  
• Star Crusader: 72
  
• Captain Havoc: 78
  
• Brutal (Paws of Fury): 75
  
• Armada Wing Commander: 85
  
• Under a Killing Moon: 93
  
• Delta V: 90
  
• Dark Legions: 85
  
• Inferno: 93
  
• Super Return of the Jedi: 92
  
• Ishar 3: 85
  
• CD Basket: 90
  
• Dawn Patrol: 88
  
• Power Rangers: 88
  
• PGA Tour Golf 486: 90
  
• Dreamweb: 93
  
• Shaq Fu: 90
  

Asi que, claramente, el mejor juego del mes era el Rise of the Robots por puntuación de la revista, y como digo en todas las demás se ofrecía más o menos la misma imagen: estábamos ante un juego que marcaría una época.

Y entonces llegó la revista PC Manía con una demo del mismo. Yo aún no tenía lector de CD-ROM, por lo que quedamos en casa de un amigo para probarlo. Lo hicimos y todos flipamos. Pero nadie volvió a mencionar lo de comprar el juego. Ni siquiera por 500 pesetas pirata.

Sólo podías manejar un personaje. Puede que en 1984 eso hubiera esta bien, pero en 1994 ya conocíamos de sobre el Street Fighter II y el Mortal Kombat donde puedes elegir entre un buen elenco de luchadores. Pero luego resulta que cada luchador sólo tenía un botón para golpear. ¿Qué quiere decir esto? Que ni siquiera puedes elegir entre dar patadas o puñetazos, sino entre golpeas o no golpeas. Después de un par de combates, el juego se hacía más monótono que el Pong. Eso sí, con muchísimo mejores gráficos.

Por eso cuando alguien me enseña pantallazos de un juego y dice que tiene una pinta estupenda, simplemente mirando las pantallas, no puedo evitar sonreír y recordar que hubo un juego que lo tenía todo para ganar. El hype, los gráficos, la prensa embelesada... y sin embargo, muchos lo recordaremos como la gran decepción de aquel año 1994.