viernes, 14 de noviembre de 2008

Si no pagas no llegas al climax

Ayer, cuando hablaba sobre la piratería, mencioné que el presidente de Epic también arremetía contra el mercado de segunda mano, pero que lo dejaba para otra ocasión. Y esa ocasión va a ser hoy. Las palabras del mismo hablando sobre este mercado (el de segunda mano) son las siguientes:

El mercado de segunda mano es un enorme problema en los Estados Unidos, nuestro principal minorista obtiene la mayoría de sus ingresos de las ventas de segunda mano. Vamos a empezar a ver como se toman medidas del tipo si compras el juego nuevo obtienes un código de activación. He hablado con algunos desarrolladores que dicen si quieres luchar contra el jefe final descargas el contenido y pagas 20 dólares, pero si has comprado el juego nuevo lo obtienes de forma gratuita. No hacemos dinero cuando alguien alquila el juego y tampoco lo hacemos cuando alguien lo compra usado, Gears fue jugado por más del doble de gente que lo compró.

Odiaría decir que mis jugadores son mis enemigos, eso no tiene sentido. Pero de hecho tenemos una regla en Epic de no comprar juegos de segunda mano, puedes estar seguro de que no serás un artista reconocido en Epic si compras juegos usados, porque vendiendo juegos es como ganamos dinero y como lo ganan nuestros amigos en la industria.


Pues vale. ¿A que mola? Es decir, tú compras un juego, no te gusta, o te lo pasas o lo que sea, y decides vendérselo a alguien. Y ese alguien tendrá que pagar por:
  1. El juego (que te lo paga a ti)
  2. Ver el final (que se lo pagaría al creador del mismo)

Básicamente, es como si tienes una película (original, se entiende), se la vendes a alguien, y ese alguien no puede ver el final si no le paga a la empresa cinematográfica. O si tienes un disco de música, lo vendes y ese alguien no puede escuchar las canciones si no le paga a la discográfica (¿y qué diría la SGAE de todo esto?).

O lo mismo si lo que vendes es un libro. ¿Os imagináis comprar un libro de segunda mano sin que viniera el final? ¿Quién se lo compraba?

Pues esto es lo que propone el presidente de Epic. Siento insistir con la misma expresión, pero... ¿a que mola?

Ahora pienso yo... ¿quién es el culpable de que se haya llegado a esta situación? Por supuesto, no existe un único culpable (y mucho menos alguien concreto con nombre y apellidos), sino que la cosa es más compleja.

Desde hace tiempo vendo diciendo que hoy en día el mundo de los videojuegos no es lo que era. Se ha ganado muchísimo en espectacularidad gráfica, tanto que nos hemos olvidado en qué consiste un juego y nos hemos centrado en el vídeo.

Por lo tanto, juegos de 10 horas de juego (o menos) se han vendido como churros por su espectacularidad gráfica. Eran (son) juegos cortos, tal vez sólo un puñado de horas, pero qué puñado de horas.

Así que con nuestras compras, hemos potenciado que los juegos se parezcan cada día más a una película que a un juego, y con ello lo que hemos conseguido es tener juegos cada vez más cortos, y que una vez consumidos (pasados, ese puñado de horas) ya no merezca mucho la pena volver a jugar a ellos. Es como volverse a leer un libro, o ver una película que ya se ha visto. O te gusta mucho, o... ¿para qué?

Así que nosotros, con nuestras elecciones, hemos hecho que los desarrolladores se hayan esforzado en crearnos excelentes experiencias audiovisuales interactivas más que verdaderos videojuegos. Pero esas experiencias no son rejugables, nunca quisieron serlo. Y nosotros (insisto, NOSOTROS) las hemos preferido a juegos no tan bien ambientados, no tan espectaculares, pero que primaban la jugabilidad (¡y la rejugabilidad!) por encima de todo.

Y ahora nos quejamos que nos quieren hacer pagar por ver el final de un juego. ¿Quién pagaría por ver el final del Tetris? ¿O por el final del Pipemania? ¿O el del Super Mario? ¿Quién en su sano juicio se atrevería a pedir dinero por ver estos finales?

Así que este es el mundo que tenemos, porque todos, como colectivo, es el que hemos creado.

Yo por mi parte, no compraré un juego que en el que haya que pagar por ver el final. Aunque a mí me sea gratis por ser el primer comprador. Creo que las cosas no deben ser así, y si bien un creador tiene todo el derecho del mundo a hacer lo que quiera con su juego (para eso lo ha creado él), yo tengo todo el derecho del mundo también a decidir qué hacer con mi dinero.

No hay comentarios: